Friday, October 2, 2009

Hombres




Sois de melocotón. Y conserváis el almíbar entre los labios.
Venís con las manos abiertas, llenas de pétalos de rosas rojas, bajo los cuales late vuestro corazón. Algunos pilotáis ultraligeros, mostrándonos inimaginables paisajes esmeralda. Otros conjugáis verbos binarios; sumáis, restáis y cubicáis letras, impunemente, ante la mirada atónita de nuestra esfera lunar.

Es indudable que el terciopelo de vuestra piel aromatiza nuestras alcobas de extrañas fragancias medievales, y mientras… entonáis cánticos nibelungos.

De vez en cuando, atrapáis una estrella fugaz para adornar nuestras frentes de hada. Hombres. La mayoría sois capaces de separar las aguas de los mares, multiplicar los panes y los peces, preparar la cena y llevar a vuestros hijos al cole.

Muchos de vosotros rasgáis nuestras tinieblas con sólo una sonrisa. Otros os materializáis en apasionados íncubos de medianoche. Hombres. La inmersión en el abanico de vuestro abrazo, fulmina todas las gárgolas que adornan la fachada de nuestro subconsciente femenino y oscuro.

Sois magos. Sois brujos. Reparáis luceros, grifos e hipogrifos (cuando su mitad águila deja de volar). Nos dibujáis columpios en las nubes y toboganes bajo el arco iris. Creáis inmensos lagos de cristal para vuestras diosas. Para vuestras madres, hijas, amigas, compañeras, esposas, ex–esposas, amantes y muñecas… Para todas nosotras. Sin excepción.

Nosotras: vuestra perdición.



1 comment: